El Machiquense Carlos Alberto Sánchez Bracho fue designado como párroco de la Iglesia Nuestra Señora del Rosario, por primera vez en la historia del templo un sacerdote nativo se encarga de la conducción de la parroquia eclesiástica.
El padre Carlos Alberto Sánchez Bracho, fue designado por monseñor Jesús Alfonso Guerrero, obispo de la Diócesis de Machiques, como nuevo párroco de la Iglesia Nuestra Señora del Rosario en La Villa, constituyéndose en el primer Perijanero en ocupar ese cargo, desde que fue creada la parroquia.
En un acto solemne y muy concurrido celebrado este sábado 27 de agosto de 2016, a las 6.30 de la tarde, participaron todos los grupos de apostolados que conforman la parroquia.
El prelado presidió la eucaristía junto a sacerdotes de otras iglesias filiales, donde Guerrero pidió “a Jesús Sacramentado que el hermano Carlos Sánchez asuma un compromiso misionero con la iglesia que siempre debe estar identificada con la cusa social.
Durante la celebración, el nuevo párroco procedió a firmar el acta, con el decreto que lo designó en el cargo. Asimismo recibió las llaves de la iglesia y demás espacios.
Durante la celebración, el nuevo párroco procedió a firmar el acta, con el decreto que lo designó en el cargo. Asimismo recibió las llaves de la iglesia y demás espacios.
Durante la ceremonia recibió las llaves de la iglesia y demás espacios de manos del Obispo |
El nuevo párroco, ante la Virgen, el obispo y feligreses, reiteró la profesión de fe y juró fidelidad para desempeñar el cargo.
“La misión de la iglesia es servir y esto se hace a través de diferentes oficios. Hoy el obispo me encomienda este cargo en mi persona. Tengo un compromiso primero ante Dios que me eligió como sacerdote, lo representaré para llevar el evangelio a esta comunidad cristiana, para santificar, enseñar y gobernar a este pueblo de Dios que camina en esta parroquia Nuestra Señora del Rosario”, sentenció Sánchez.
"La misión de la iglesia es servir", dijo el nuevo párroco Carlos Sánchez |
La Asociación Civil de la iglesia hizo entrega a los asistentes de un presente con la oración del Padre Pio, compuesta para ser rezada después de la comunión, como testimonio de fe y entrega al Cuerpo de Cristo.
El Padre Carlos agradeció a los presentes por acompañarlo en un día tan significativo y en especial a su madre, hermanos y familiares que se trasladaron desde Machiques.