Johan Moscote será párroco en la iglesia El Buen pastor de La Villa y Jesús Rincón en La Inmaculada de Las Piedras.
Jesús Daniel Rincón Suárez y
Johan Adolfo Moscote Rincón, nativos de La Villa del Rosario, recibieron el
sacramento sacerdotal este sábado a las 10.00 de la mañana en la iglesia
Nuestra Señora del Rosario, durante una eucaristía presidida por monseñor Jesús
Alfonso Guerrero, obispo de la Diócesis de Machiques.
Johan Moscote y Jesús Rincón en pleno acto de consagración |
Junto a los presbíteros de las
diferentes parroquias de la diócesis, el prelado ante una masiva concurrencia de
feligreses agradeció al señor por este magnifico regalo. “La Diócesis se engalana con la ordenación sacerdotal de Johan y Jesús. Él los llamó un
día a seguirles y ellos respondieron; hoy son llamados a ser profetas”.
En la emotiva ceremonia, los clérigos recibieron la bendición del obispo al imponerles las manos y hacerles la oración que los consagró como nuevos ministros de la iglesia católica. Posteriormente recibieron los ornamentos como la estola y los santos crismas. Los sacerdotes acompañantes también impusieron sus manos sobre ellos.
Imposición de los santos crismas |
“Dios los ha investido para que
cada día exista una iglesia más humana y misionera. Dar nuestras vidas para que
los demás tengan vida y estar al máximo servicio de Dios”, dijo Guerrero, mientras
la concurrencia acompañada por la coral seguía con cánticos y oraciones que avivaron la
espiritualidad en el sagrado recinto.
Sacerdotes de las parroquias filiales presentes en el acto |
Grupos de apostolados de Perijá, religiosas, seminaristas de Mérida, donde
cursaron estudios Moscote y Rincón, estuvieron presentes junto a los alcaldes, Olegario
Martínez de Rosario de Perijá y Alfonso “Toto” Márquez de Machiques,
Johan Moscote, intervino para agradecer a Dios por el gozo y por esta obra conducida por el Espíritu Santo de tener a dos nativos de La Villa en este momento tan especial. Hizo énfasis en los sacerdotes Eladio Domeño y Marcelino Laurenz, quienes condujeron la vocación de los jóvenes que estaban recibiendo la consagración.
“Padre realiza tu obra en
nosotros para que este ministerio que nos confías, sea fruto para tu pueblo”, dijo
Jesús Rincón, entregando su oración como una ofrenda a Dios. También le agradeció
a la madre María del Rosario por su acompañamiento.