Solamente cuatro sectores reciben colocaciones del Ministerio de Alimentación: Pastora, Ranchería, San Luis y Valle del Río de las 76 barriadas.
Jesús Rincón, concejal de Machiques de Perijá por Primero Justicia, acusa que en el municipio hay hambre. La distribución de alimentos del Gobierno no cubre las necesidades de las familias perijaneras. Y es que solo con la red Mercal se atiende tres por ciento de los sectores de la jurisdicción. Son cerca de 11 a los que les llegan productos a precios subsidiados.
Rincón destacó que en los negocios y supermercados de Perijá no se ven los productos nacionales y los importados llegan desde Colombia a precios costosos para las familias. Señaló que en Machiques existen 430 códigos de Sunagro limitados, licencias otorgadas por el Gobierno para la producción, comercialización y distribución de alimentos, además de 454 consejos comunales, redes socialistas dependientes de lo que les envía el Ejecutivo.
La caída de la producción interna alarma asegurar la comida para los machiquenses. El edil recordó cómo la empresa láctea Indulac producía en el pasado un millón de litros de leche diarios y ahora en manos del Gobierno, tras la expropiación, apenas suma seis mil litros de leche.
El reflejo de la escasez de alimentos toca todos los estratos de Perijá. “Reclaman que no les llegan los CLAP”, dijo al detallar la precariedad en la que están los indígenas y las acciones que hacen afectando a la sociedad, como el cierre de la llave de conexión de agua potable para exigir respuesta de las autoridades.
Vía: La Verdad